Capitulo 3

Tom: Pues que sepas listo, que ese chiste te ha costado un trozo de pizza û-û
Gustav: Si hombre, ¿Y que mas? ¬¬'
Tom: Y el ir a por las cervezas :3

Gustav refunfuñó y se levantó direccion a la cocina.

Tom: Ah, y apúntame los teléfonos del zoológico ese y del bar. Esta tarde haré unas llamaditas.

Al decir esto, la sonrisa de Tom se dejó caer por la habitación. Tal vez las cosas mejorasen a partir de ese momento.
Tom sirvió varios trozos en los distintos platos que anteriormente había colocado en la mesa. Tardó poco en coger el primer trozo  y darle un bocado.

Tom: Creo que en eso de músico puedo tener suerte... No se. Gustav tiene razón, toco bien la guitarra... ¿Tu que opinas? - Denis le dirigió la mirada y Tom la recibió acordándole que le hablaba a las paredes.- Bueno. Lo intentaré. A lo mejor me coge algún tipo de alguna discográfica y termino siendo famosete... Oh, eso si que molaria.
Gustav: Ten, tu cerveza.- Gustav puso la lata junto a la mejilla de Tom, haciéndolo pegar un gran brinco, a causa del frío  Gustav se echó a reir, pero Tom simplemente le arrebató un trozo de pizza. ¡Eh so cabron, trae eso! Ò_Ó
Tom: Es el castigo por lo de antes y lo de ahora. û_û Soy bueno, te lo he dejado solo en un trozo.
Gustav: Que te den.

Impuso quitandolo otro trozo de su plato. Al final cada uno comió lo que pudo. Denis la que más.
A Tom le horrorizaba la idea de tener que alimentar una boca mas. Y el tener que alimentarla asi, aun cuando no habia nacido, lo aterrorizaba aun mas.
No sabia como se las iba a apañar para cuidarles a los dos, pero tenia un compromiso mas fuerte que cualquie quebradero de cabeza, e iba a cumplirlo costase lo que costase.
Tras la comida, Gustav se dedicó a cojer la mesa y Tom fue a bajar la basura.
Denis se levantó de la mesa, se dirigió a su habitacion y se vistió para salir a la calle. Al llegar Tom arriba y encontrarsela vestida y sentada en el sofá, sonrió y fue a cojer una sudadera.

Tom: ¿Qué te parece si nos dejas al perro y te lo sacamos a pasear?
Gustav: Pues viendo que es vuestro, si, me hariais un gran favor :D
Tom: De nada, hombre ¬3¬

Los tres salieron del edificio, y caminaron en silencio hasta la casa de Gustav, donde Domo, esperaba impaciente un largo paseo. Nada más abrir la puerta, el animal, corrió a recibirles. Gustav no soportaba que se intentase subir encima de las personas, aunque a Tom le hacia gracia las tonterias que hacia, y Denis parecia entretenerse con el lo suficiente para parecer una persona completamente normal.

Tom: ¿Cuando te lo traigo?
Gustav: Cuando os canseis... Estaré aqui todo el dia.
Tom: Deacuerdo, pues entonces hasta luego.

Cogió a Denis de la mano y a Domo por la correa, y a ambos los sacó de la casa.
Se habia acostumbrado a llevar a Denis de la mano por la calle. Asi conseguia que nadie se le acercara indebidamente y por otra parte, se sentia menos solo y desgraciado.
Daban la apariencia de una pareja sencilla y alegre. Con un perro de apenas seis meses que le llegaba a Tom por encima de la rodilla. Fueron al parque y una vez alli, se sentaron en un banco, soltaron a Domo y este comenzó a corretear y revolcarse en el cesped, aprovechando su libertad.
Tom cogió aire y procuró disfrutar de esos momentos tan poco frecuentes en su dia a dia.

Tom: Ya va haciendo mas calor...- Comentó con naturalidad.- Se nota que esamos a junio... ¿Te gustaria que fueramos a algun sitio estas vacaciones...?

Preguntó ilusionado. Denis lo miró de reojo, sin expresion alguna, cosa que arrebató la sonrisa a Tom, cuando recordó que llegaban a fin de mes de milagro. Apoyó los codos sobre sus rodillas y cruzó las manos con seriedad.

Tom: Encontraré trabajo. Te lo prometo...- Juró solemnemente, cargando su pecho de la poca esperanza que le quedaba.- ... De aqui a un mes... Tendremos de sobra para comprar todo lo que nos haga falta. Y te llevaré de compras. A las chicas os gustan las compras, ¿no es cierto...?

Le hubiera gustado que Denis reprimiera sus ilusiones con algun comentario pesimista de los que ella solia decir. Pero ni una palabra salió de su boca, tan solo una media sonrisa que dirigió al suelo. A Tom le pareció suficiente para dejar de prestarle atencion por un momento. Domo estaba a varios metros, jugueteando con otros perros y entonces vió que no tenia mucho más con lo que distraerse.
Dirigió su mirada a la barriga de Denis, de forma que esa tranquilidad que se habia ido creando, se desmoronó de golpe.
Un bebe. ¿Cómo iba él a cuidar un bebé?¿Con qué experiencia iba a cuidarle?¿Con qué trabajo iba a mantenerles?¿Con que paciencia iba a soportar tanta responsabilidad? ¿Y si Denis no mejoraba nunca?¿O si no cuidaba al niño por culpa del shock?
Sintió como se le contraian las ideas, y los ojos le dolian.
Angustia.
Agobio.
Otra vez, como todas las noches.
Pero no lloraría. No alli en mitad. Delante de Denis. A pesar de la infinidad de veces que habia llorado a lo largo de aquellos duros meses, jamás se habia dejado ver por nadie. Y ultimamente no disfrutaba de los momentos de soledad que tanto necesitaba para desahogarse.
Se presionó los ojos con las mangas y mantuvo la compostura. Luego se giró hacia Denis y le dirigió una reconfortante mirada que la chica captó, pues llevaba mirandole desde hacia un rato por el rabillo del ojo. Notó como se ponia rojo de vergüenza. Le pasaba muchas veces, cuando ella le miraba constantemente sin expresion ninguna. Una reaccion un poco infantil, que aun no podía controlar.

Tom: ¿Nos vamos ya...? - Le preguntó incitandola a levantarse.- Creo que se está haciendo tarde... ¡Domo...!

Se levantó del banco y desenrolló la correa de al rededor de su mano, haciendo gestos para que Domo volveria hasta él y lo enganchara debidamente. Por suerte el cachorro era obediente  además de grande.
Cuando se vió dispuesto le ofreció una mano a Denis, con otra forzada sonrisa. A veces pensaba que Denis solo se movia si le sonreias. Ella tomó su mano y se levantó cabizbaja, cosa que extrañó a Tom, pues nunca la habia visto cabizbaja. Pero aunque nunca antes la hubiera visto asi, no soportaba esa sensacion de tristeza que respiraba a su alrededor. Sintió un fuerte deseo de abrazarla, pero reprimió ese sentimiento y se conformó con darle un apretón en la mano.
Le hubiera gustado ser correspondido.

Comenzaron a caminar de vuelta a casa. Sin hablar. Sin mirarse. Sin levantar la cabeza del suelo. Se podria decir que era gracias al perro por lo que andaban.
Se dirigieron a casa de Gustav, para devolverle el perro como casi todos los dias.

Gustav: ¿Cómo fue el paseo? - Preguntó abriendole paso a Domo. Tom no respondió más que con un suspiro, que fue bastante respuesta para Gustav.- ¿Quéreis un cafe o algo?
Tom: Son las siete de la tarde Gustav...
Gustav: Oh, tienes razón... Me he tirado toda la tarde en el despacho y he perdido la nocion del tiempo... ._.
Tom: Ya... Entonces te dejamos, estarás ocupado.
Gustav: ¿Qué? No, ya terminé, no molestáis en absoluto :)

Les abrió paso a ellos tambien y aun sin soltar a Denis, Tom entró al lujoso piso de su amigo.
Gustav habia sido un chico con suerte. Hasta hacia un par de años, no habia nunca tenido una verdadera amistad con él, aunque lo llevara conociendo desde el parvulario. Tras sacar con notas impecables la primaria, la secundaria y su carrera de ingeniería informática, Gustav habia conseguido un empleo que le permitia vivir sin ataduras económicas de ningun tipo.
Tom le tenia un gran aprecio. No solo por que les cuidaba el perro, tenia dinero a mansalva y tenia exito en la vida, si no por lo mucho que les habia ayudado los ultimos meses y lo facil que le resultaba sacarle una sonrisa a Denis.
Por eso ultimo le tenia envidia más bien.

Gustav: ¿Quieres una cerveza?
Tom: No, dos cocacolas mejor.
Gustav: ¿Le vas a dar cafeina a Denis? '-'
Tom: ¿Le vas ha dar alcohol?
Gustav: Vale, vale... Le pondré un refresco o algo asi...
Tom: A mi otro entonces...

Gustav se fue direccion a la cocina, dejando solos a ambos dos en el salón. Todo blanco. Cuadriculado y elegante. Como debia de ser la casa de un diseñador de una marca prestigiosa de vehiculos. A Tom no le gustaba, la veia demasiado fria y seria, cosa que contrastaba muchisimo con el personaje que vivia dentro.